Saturno.

Un desierto, poca agua, pocas estrellas y poca vida.
Mar, respeto, temor libertad y expresión.
Tornado, fuerte y destrozador. De donde se forman las estrellas.

La vida, nosotros y todo lo que la conforma. Estamos en ella, afortunadamente o lamentablemente hacemos parte. No solo es decirlo, es aceptarlo y va con nuestros miedos, excusas, inseguridades y hasta las cosas buenas.

Con el paso del tiempo he estado aprendiendo eso. Todos hemos pasado por situaciones muy dolorosas, y esas, a veces no nos hacen fuertes sino que nos debilitan un poco. Nos muestran que el tornado no es controlable, que en el desierto preferiríamos morir y en el mar naufragar por opción.

Es que aunque todo eso pasé, no nos vamos a hundir y vamos a seguir sintiendo. El mundo está lleno de personas que sufren, no es sorpresa.. Pero sobre todo de gente fria, de gente que se protege, que pone una coraza para que nadie le haga daño, que sus miedos son su jefe. Es una realidad muy triste y es adversa. Siempre nos lastimaran o lo haremos nosotros, puede que hasta no podamos perdonarnos. Más no podemos dejar de vivir y de sentir con la misma intensidad. Por más que pase el tiempo, por más que carguemos mucho peso, aunque aparezca el ayer con sus recuerdos no podemos ser fríos, no más. Debemos intentarlo, debemos enamorarnos, de amar, cultivar lechugas si es lo que queremos y de buscar la forma de tener ideales. Solo sigamos sintiendo que por más fuerte que sea la vida, por más subidas y bajadas que tenga aún hay motivos. Siempre los habrá. Y uno de esos es saber que nacimos para algo más, no somos del todo débiles y estamos para ayudar. Para crecer como personas y para mostrarle al mundo que basta con solo uno que pueda alzar la voz, que pueda cambiar un poco toda la mierda que se nos viene encima. Porque si se puede hacer diferente el mundo y a veces no solo con un escrito pero este es un medio.

Todos somos parte, levantarse del asfalto pesa y mucho, se necesita de constancia, de la voluntad que tengamos y de que tan fuerte haya sido el golpe. Pero si se puede, puede tardar meses o incluso años, se que en algún momento nos levantaremos, todos absolutamente todos y nos daremos cuenta que la salida estaba en nosotros. No necesitábamos distraernos, ni drogas, ni sexo, ni fingir que nada pasaba. Necesitábamos caminar, sentarnos a pensar, un abrazo, una carta para nosotros y un perdón propio. Podemos ser felices. Podemos volar a un mundo de magia desde el que ya estamos y así mismo embotellar nuestros miedos y estar en los anillos de Saturno si así lo queremos.

Ríete, que te ves muy bien.

Quiero decir que ahnelo vivir y me mueve el sentir.

Piensa y vive con el corazón, nacimos para servir, para ser amor y ser más conscientes. Pero sobre todo para ser feliz. La vida es una fiesta, ríete, sí hazlo más fuerte. Que te escuche la Tierra entera, y el cielo alumbre por lo alto que estás. la tristeza no tiene más cavidad aquí. Somos los protagonistas de nuestras historias, no las víctimas. Somos fuertes, guerreros y valientes. Hemos tenido luchas y algunas han sido con capa y espada, otras no. Sin embargo estas nos han formado, y mira ahora eres una persona maravillosa, lo vales todo. Mucho es que mirate al espejo... Eres y has sido muy valiente, por eso acompáñame en este camino, Vamos.

Todos somos uno y que bonito es el seguir, el levantarnos del asfalto pero también el tener el coraje para someternos a las profundidades de nosotros mismos, de sentir, de ser plenamente honestos.

Todo está bien, créeme que lo está. Di lo que piensas, di lo que creas. Se tú, hablar está bien, sentir enojo, tristeza, alegría. Es genial se honesto (a) estamos para eso, que si nos equivocamos, al menos cuando nos acerquemos al umbral de la muerte, podremos decir: Viví, y lo hice con cada partícula de mi ser. No tengas miedo no lo hagas, siente, de verdad hazlo. No podemos tener miedo, ahora más que nunca debemos encontrarnos y hacer lo que nos llene de expresión.

¿Qué importa el miedo a lo que no tenemos? Nos decían que nuestro plan era nacer, crecer, reproducirnos y morir. Ahora nos estamos dando cuenta que hay algo más, y es que importa más el camino que a donde te lleve. Si leíste bien, importa más el camino que a donde te lleve. Mucho más y eso nos viene bien. Porque es que a demás de eso nos dicen que debemos tener para vivir, crecer, estudiar y trabajar. Tampoco es que este mal. Si eso te llena de algo inexplicable, donde tu dices ¿Sabés algo? Soy muy feliz y es que me he encontrado, eso está súper. Mil felicidades. Pero si no, sal de ahí, vamos que se puede, yo creo en ti.

Podemos impactar a otros y si, se puede lavando platos, cosechando lechugas, es en lo que te haga feliz. Claro no suena muy bien pero es cierto. Todos somos útiles y necesarios, cada uno de nosotros. Tú eres importante, tú también, tu familia y yo igual.

Somos amor, somos risas, sueños y riesgos, solo tu vives por ti. Hoy es un día muy importante, hoy es el día de dejar los problemas, las excusas y cada uno de nuestros temores en otro lado. Es momento de levantarnos, de dejar de ser cuadraplejicos mentales. No importan los ritmos, ni el pasado. Nuestro momento ha llegado nos la pasamos esquivando las hermosas casualidades de la vida, les decimos: no, después. Después no es lo más apropiado, las personas cuando llegan a viejitos, cuando están en una completa tranquilidad piensan: Ay, se me olvido esto, no hice lo que quería. Tal vez ya es tarde, pero tal vez no y es que ojalá que no lo sea cuando reaccionemos y cultivemos lechuga si es lo que queremos.

Como personas hemos hecho mucho daño y ha sido por nuestra desintificación. Creemos que si alguien no suple los estándares sociales es un marginado o incluso otro víctima de la vida, pero no, no es así. En el camino estamos para perseguir nuestro interior, para ir tras lo que queremos, para dar amor y para tener una gran conexión con nosotros mismos. No necesitamos ir muy lejos, podemos conocer un poco el mundo empezando por nosotros, aceptando, haciéndolo cada vez más. Era lo que decía sobre equivocarnos, lo vale, hasta el más pequeño instante. La vida es una fiesta, nuestro punto de vista es muy influyente, la risa, la alegría forman una gran parte. Pero como olvidarlo, nos falta una gran amiga y esa es la determinación, así como aceptamos nuestros errores del hoy, también los del ayer. Perdonemonos, recordemos porque recordar es volver a pasar por el dolor y no está mal, es parte de una curación, sanemos las heridas, ya es suficiente con decir que no nos duele, cuando a vista cierta se ve que estamos tratando de arreglarlo todo con algo pequeño y aunque volver a pasar por un momento difícil es fuerte, hizo parte de nosotros y para que no nos aniquile, debemos pasar por ahí y reinventarnos. Empezar de nuevo... Porque hoy, hoy es una oportunidad para empezar de nuevo en la vida. Todos somos uno, todos somos amor.

-V

Nostalgia.

Hoy es uno de esos días donde las madrugadas son más que frías y hay dolor en la bahía del interior.

El tiempo pasa, parece que cada vez va más rápido.
De él quedaron recuerdos fuertes y maravillosos. Pero sobre todo, esa gran sensación de querer repetir esos momentos que ya transcurrieron, que simplemente se fueron sin dar aviso. Son de los que te causaban alegría, pero vale, no sabías que sería para tanto. Ahora, ahora sí lo es.

En esos momentos vivimos, sentimos, salimos y aprendimos pero no del todo. Porque pensamos que vendrían más. Que esa mañana con tus amigos en el bosque volvería a repetirse, que ese amor, ese que siempre estaba ahí, ahí se quedaría, que las tardes jugando, charlando solo serían algo más.

La respuesta es que no, recibimos demasiado. Pero nunca esperábamos que eso terminara, nunca pensamos que esa mañana con tus amigos sería la última, que ese enamoramiento se desvaneceria, que tus amigos del parque de la mujer tuvieran vidas tan fuertes que realmente todo pesaba.
Como estos hay muchos ejemplos más, la verdad es que éramos felices, ahora nuestro consuelo es recordar porque eso es vivir. Al sentir tantas cosas, al extrañar y al ver como esta todo, al simplemente verlo con alegría y desear repetirlo. Es algo llamado Nostalgia y así es lo que hoy siente mi ser.