Hay momentos de la vida en los que todo parece estar en el suelo y no en un buen sentido. Donde cargamos una gran mochila, el corazon en pedazos y una desazon impresionante. Llegamos al punto en el que nos dejamos morir y decimos que no podemos, que nos cuesta, que estamos muy cansados. Debemos dejarnos morir pero solo soltando las cargas del ayer y empezando de nuevo. Es difícil, pero de nosotros depende. Muchas veces he sentido que estoy llevando una vida que no quiero y honestamente mi motivación es pensar que en una mañana todo será distinto, mientras tanto me esfuerzo por hacer que todo sea mas llevable y es con cosas muy pequeñas.
Cuando la persona que amaba se fue me perdi a mi, senti que no tenía identidad ni sabía que hacer y como lo he hecho toda la vida me refugie en cosas. Esta vez quise trabajar mientras estudiaba, estuvo bien pero me dedique gran parte de mi día a ello y ya no tenia un instante para ver mi reflejo y sentirme bonita. Tenia trabajos de 10 horas o más. Mi cansancio era impresionante, no salía con mis amigos, no dibujaba, no tocaba guitarra, no era yo. Un día no debia ir a trabajar y fue en el que me puse a pensar en la vida que estaba llevando. Me senti como la persona más fracasada, me pregunte si esto significaba vivir, si tanto me valia la pena. Así que hice lo único que sabía hacer bien que fue ir a un parque, sentarme, escuchar musica y ver el cielo. Era algo que no hacía mucho pero me recordaba a mis tiempos de soledad en los que estudiaba literatura, en esos mismos momentos en los que no me sentía en plenitud pero lastimosamente había perdido algo tan basico que hacerlo nuevamente fue un gran reto y se sintió maravilloso. En ese parque tome una libreta y escribi. El tipico cuaderno que no le muestro a nadie, hable de todo lo que me dolia pero me di alientos y me dije que Valentina Restrepo podía.Me esforce por volver a leer, por tocar guitarra, por salir con mis amigos, compre maquillaje, cositas pqra el cuidado del rostro, intente levantarme más temprano y renuncie a mi trabajo. Entré a uno que me da la facilidad de estar en Taekwondo y estudiar. Aparentemente todo se estaba acomodando mejor y estoy bien con eso. Me estoy recuperando, me estoy encontrando de nuevo. No son los pasos más grandes pero de a poquitos voy. Hoy fui capaz de ponerme un vestido con botas, suena gracioso pero no se imaginan el punto de inconformidad al que he llegado conmigo misma que esto significó haber desbloqueado un nivel. Volver a sentirme segura, Bonita, con amor propio, con una vida tranquiila ha sido un proceso largo. Me ha costado lagrimas, dolor y desesperación pero es mi camino. Se que sino lo hubiese intentado me sentiría peor y ahora estoy mal pero no tanto como antes y así, un día podre mirar atras, ver el proceso, pensar que sin duda valio la pena.
A veces necesitamos dejarlo todo y elegirnos a nosotros ver lo que esta pasando y cambiarlo. Tenemos un plato de sopa, podemos probarlo pero de nosotros depende si lo terminamos o lo dejamos a un lado, porque puede que no sea agradable y no estamos obligados a llevar lo que no queremos. Siempre se puede decir basta y comenzar, cambiar e ir en busca de lo que nos puede hacer bien, de lo que nos acerca más a nuestro interior y a esa felicidad. Hay altos y bajos. Pasamos por procesos difíciles y la vida no es sencilla pero aun con todo eso, podemos sentarnos bajo el solecito y escribir de nuevo. Empezar una nueva historia, buscar ayuda, sanar, sonreír, soñar y seguir. Debemos ir a nuevos lugares, expandir nuestras vistas, comer cosas ricas, conocer personas que nos edifiquen y asi mismo nosotros ser buenos amigos, buenos humanos.
Podemos, aunque cueste muchísimo intentarlo a la larga terminara siendo algo bueno. Vale la pena, cada uno de nosotros como individuos valemos la pena y aunque a veces sigamos con esa mochila llegara un dia en el que la soltemos por completo y todo cambie. Por ahora, nos queda seguir con nuestros dilemas pero querienso renacer y haciendo cositas por ello. Se puede, estoy segura de que se puede y cada persona que sienta que no, le doy muchos ánimos porque yo también sentía que no, que esto era lo que me habia tocado, que era la culpable y ya. Solo quedaba llevar todo como fuera, ¿no? Y hacerme la fuerte. No es así, es un proceso y un día todo puede ser nucho mejor, podemos escapar de lo que nos asusta, de lo que nos toco y escribir nuevas cosas. Llevando una vida completamente distinta pero a gusto. Se puede seguir adelante.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario